top of page

DIÁLOGO ORANTE

  • Jose Luis Aranda & Alejandro Montaña
  • 29 may 2016
  • 2 Min. de lectura

El diálogo orante es el hablar con uno mismo, con la voz que usamos dentro de nuestra cabeza y va encaminado al análisis propio, o para preguntarse a uno mismo, ¿como está?, ¿qué siente? y ¿porque?. Buscando el conocimiento propio y conciencia de nuestros sentimientos.


Estamos acostumbrados a hablar solamente hacia afuera, en ocasiones le contamos todo a otra persona o le hacemos preguntas a ajenos, sobre los propios sentimientos o buscando respuestas que al simplemente hablar con nosotros mismos encontraríamos. Sin embargo no consideramos la posibilidad de hablar con nosotros mismos, lo cual resulta irónico pues somos la persona que más nos conoce.


Llenamos nuestra necesidad de comunicación solamente haciéndolo con otras personas, en vez de comunicarnos con nosotros mismos. Hoy en día es común ver a personas que parecen no soportar el silencio, que necesitan llenarlo con parloteo, risas, música, etc. Y esto puede ser otro reflejo del cómo nos da incluso miedo quedarnos solos con nosotros mismos, nos da miedo lo que nuestra voz interior nos pueda decir, así que la callamos.

¿Por qué no darnos un momento para conversar con nosotros?


La escucha, es parte también de cualquier diálogo, y aunque también seamos capaces de escuchar a los otros, no nos escuchamos a nosotros mismos, y cuando nuestra mente no es escuchada, hace que el cuerpo lo grite.


A veces es mejor hablar contigo mismo que con los demás porqué así te permites conocerte y darte un tiempo de cuidado propio.


Las conversaciones con uno mismo deberían ser como cualquier otra, pueden ir desde conversaciones simples, preguntarse cómo fue el día de hoy, hasta adentrarse más y preguntar por nuestros sentimientos.


Una actividad para iniciar esta conversación de uno, puede ser el hablar solo, sin embargo, en voz alta, haciéndose preguntas y contestándolas, forzando el diálogo orante, para que se pueda volver algo natural.


Esto te ayuda mucho, cuando yo lo hice por primera vez, aunque era una sensación extraña, me pareció interesante y me hizo consciente de la posibilidad de hablar conmigo mismo, también, me di cuenta que es algo que jamás había hecho.


 
 
 

Comments


¿Te gustó? ¡Háznoslo saber! 

bottom of page